sobre voluntariado
y ha aparecido una anciana,
se llamaba Carmen,
cercana a los 80 años,
sumida en la miseria,
sola,
sin ver la calle
durante cuatro meses.
Un voluntario
le cortaba el pelo y,
en esa taciturna estampa,
de paredes grises
y desolación,
ella explicaba
sus 34 años
ganándose la vida
a partir de propinas
que le daban
por limpiar retretes.
Y el mundo
se me
ha precipitado
mejilla abajo.
Ha sido triste y hermoso,
supongo que he llegado a querer
honestamente
a esos héroes anónimos.
se llamaba Carmen,
cercana a los 80 años,
sumida en la miseria,
sola,
sin ver la calle
durante cuatro meses.
Un voluntario
le cortaba el pelo y,
en esa taciturna estampa,
de paredes grises
y desolación,
ella explicaba
sus 34 años
ganándose la vida
a partir de propinas
que le daban
por limpiar retretes.
Y el mundo
se me
ha precipitado
mejilla abajo.
Ha sido triste y hermoso,
supongo que he llegado a querer
honestamente
a esos héroes anónimos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario